Todo sobre las Catrinas
La cuna de la Catrina de barro

Iniciaba la década de los 80 cuando Álvaro de la Cruz provocó tremendo revuelo en el Tianguis Artesanal de Pátzcuaro. El artesano oriundo de Capula colocó en la Plaza Vasco de Quiroga unas estilizadas figuras de barro. Sí, era la catrina, ese personaje creado por el caricaturista José Guadalupe Posada que luego tomó su mejor versión del mural “Sueño de una tarde dominical en la Alameda Central” de Diego Rivera. La exhibición fue controvertida. Se dice que causaron molestia porque era la muerte, pero las figuras se vendieron muy rápido. Nadie imaginó que ese día iniciaría una historia de éxito...
Origen de la Catrina

La Catrina es el símbolo de la muerte en México. Su sombrero estilo francés fue dado por José Guadalupe Posada, quien la hizo aparecer en escena en 1912. Su nombre original, la Calavera Garbancera surge como una crítica al clasismo de la sociedad mexicana, que hoy todavía podemos encontrar. Los vendedores de garbanzo negaban su origen indígena y querían tener un estilo de vida como el de los europeos en México. "Tanto los ricos como los pobres mueren". Desde ese momento, el artista usó calaveras y esqueletos para acompañar sus rimas sarcásticas sobre política, religión y la vida cotidiana de...
La flor de Cempasúchil

La flor de Cempasúchil (cheemspasúchil), conocida en otros lugares con muchos otros nombres como tagete o hasta Marigold, es nativa de México (y centroamérica) y es icónica de esta temporada ya que se usa para adornar todo lo relativo a la celebración de Día de muertos.Su nombre en nahuatl (Cempohualxochitl) significa "Veinte flores" o "Varias flores" y cuenta con su propia leyenda de amor trágico.Es una planta muy versátil ya que aparte de ser ornamental se usa de forma medicinal, en la gastronomía y de forma industrial.En este día de muertos recuerden al Cheemspasúchil.
La leyenda del Cempasúchil

La leyenda de amor trágico: Xóchitl y Huitzilin estuvieron unidos por el amor desde que eran pequeños. Siempre compartieron juegos y los paseos por el pueblo.Dice la leyenda que todas las tardes subían a la montaña dedicada a Tonatiuh, el dios azteca del sol. En cada visita colocaban de ofrenda ramos de flores. En ese sitio fue donde juraron amarse por siempre bajo cualquier circunstancia, incluso la muerte.Un día, la guerra llegó y Huitzilin, como buen guerrero, tuvo que separarse de su amada para defender las tierras aztecas. Después de un tiempo, Xóchitl recibió la noticia de que su compañero...